lunes, 18 de abril de 2011

Las verdades de YouTube

Recientemente he recibido correos de mis pacientes haciendo referencia a diferentes videos que circulan en la red relacionados con las supuestas zonas oscuras de la psiquiatría: pretendidos abusos de la industria farmacéutica, efectos secundarios de los medicamentos, invención de enfermedades con fines comerciales, etc.


Echando un vistazo en YouTube, la cantidad de documentos relacionados con estos temas es enorme. Por cierto, ninguno de ellos es presentado por ninguna universidad o instituto científico.

La mayoría de estos videos tiene el formato general de un documental y consisten en una edición acelerada de aparentes entrevistas que en realidad son breves intervenciones de pacientes, médicos, psicólogos, etc. Una narración le da cierto aspecto de unidad a los clips. En ningún caso se aclara quién o quiénes son los responsables (por así decirlo) de los videos. No se especifica si son presentados por alguna asociación civil, religiosa, política o mercantil. Tampoco se permite saber cuáles son las preguntas específicas a las que cada personaje contesta.

Aunque la narración de los videos hace referencia a reportes y datos científicos, no hay momento en el que aparezcan las fuentes de las cuales se obtuvo la información ni los nombres de los investigadores o instituciones que las sustentan.

En todo documento serio se presentan los diversos puntos de vista acerca de un asunto controversial. En los videos que mis pacientes han descubierto en Internet la visión es totalmente parcial y solamente aparecen los testimonios, comentarios y opiniones que giran alrededor de puntos de vista muy particulares que por lo demás son totalmente debatibles. De esta manera, dichos videos no parecen tener la intención de generar una discusión seria y razonada sobre un tema, sino básicamente asumirse como detentores de una verdad escandalosa que debe hacerse pública.


Quién iba a sospechar la enorme cantidad de mentiras ocultas y verdades alteradas de la práctica psiquiátrica de las que a la fecha nadie se había enterado… hasta que las descubrimos en YouTube. Estamos salvados.